Practicas preliminares: ecuanimidad

La ECUANIMIDAD es una cualidad de la mente desapegada,

de la mente que no se identifica con un EGO,
y es la antesala de la COMPASION
y el AMOR.

No es una cualidad que pueda ser fabricada,
sino que surge espontáneamente cuando
la mente deja de estar bajo el yugo del EGO.

Lo que sí que podemos hacer es practicar una
serie de TECNICAS que nos ayuden a
contrarestar los patrones de conducta egoicos
que surgen de forma automática,
y que siempre son PARCIALES,
sesgados por los tres venenos
del DESEO, el ODIO y la
INDIFERENCIA,
manifestaciones
del AP EGO.

Las técnicas son como los dos palos
que cuando se frotan adecuadamente,
dan como fruto la llama que los consume,
la COMPASION,
y la luz que la acompaña,
la SABIDURIA.

Compasión y sabiduría son las dos
caras de la mente despierta,
y son inseparables. No podemos
encontrar seres compasivos ignorantes
ni seres sabios sin compasión.

Pero hasta que la mente despierta no se
manifiesta, debemos practicar técnicas
para contrarestar la ignorancia y el apego,
debemos frotar los palos hasta descubrir
la verdadera naturaleza de la mente y
hacerla estable.

Una vez la llama surge, apareceran una
serie de técnicas para mantener viva la llama,
que seran como leña para el fuego que ya
ha prendido.

Sería estúpido echar leña a un fuego
inexistente, pero esto es lo que nuestro
ego espiritual nos induce a hacer constantemente,
asegurandose de que no frotemos
los palos para que surja la llama.

Si no somos capaces de darnos cuenta
de cuáles son las técnicas que debemos
practicar para que surja la primera chispa,
seguiremos echando leña al fuego inexistente
que sólo existe en nuestra imaginación,
avivado por nuestras acciones egoicas.

De ahí el viejo dicho de que mas importante
que la práctica principal son los PRELIMINARES:
Sin una buena práctica preliminar,
no puede haber chispa ni
práctica principal.

Sin desenmascarar al viejo y astuto EGO,
nunca podremos dejar de identificarnos
con él y seguiremos siendo sólo
practicantes VIRTUALES,
o sopladores,
vagando por mundos imaginarios
de forma indefinida, sin conocer
la CHISPA de la VIDA:

La naturaleza de la mente